12/11/20

CONSTRUCTORES DE ATLÀNTIDA - LA FAMILIA FORNI

 

 CONSTRUCTORES DE ATLÀNTIDA  -  LA  FAMILIA  FORNI

Crónicas de Atlántida - por Wilson Mesa

Muchas veces, recorriendo las calles del Balneario, uno se encuentra con casas que llaman la atención, ya sea por sus formas, por la ubicación, o por la fortaleza de su construcción. Y al tratar de ver quién fue el constructor, a veces aparece un pequeño cartel en bajorrelieve en algún lugar medio escondido, donde luce el apellido FORNI.

Así van quedando las huellas de esas personas que han contribuido –con su trabajo y con su ingenio- a completar la belleza de un lugar que siempre tuvo un sello distintivo en su arquitectura.

Me apresuro a decir aquí que también hay otros apellidos de constructores que fueron muy reconocidos, como Deana, Báez, Bonaldi, Astaldi, Merlo, Isolini, Nassutti, etc.

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Hubo una época en la que fueron llegando a nuestro país oleadas de inmigrantes italianos, suizos, españoles, sirio-libaneses, rusos, húngaros, y de otras nacionalidades, que encontraron en este rincón del mundo un lugar donde trabajar y formar familia. Traían esperanzas, traían costumbre de trabajo y traían poca cosa más en sus maletas.

Aquí, en Atlántida, hay ejemplos concretos de esa inmigración trabajadora; un caso es el de la familia Forni, de la cual quiero contarles apenas algunos trazos de su origen y su legado para la comunidad.


EL ORIGEN

 Pedro (Pierino) Forni Pesenti nació en el año 1903, en la zona rural del lago de Lugano, Cantón del Ticino, en la Suiza “italiana”. Fue el único miembro de su familia que emigró a América.

Pierino vino al Uruguay en el año 1921, con 18 años cumplidos. Imaginemos un jovencito de esa edad desembarcando en el puerto de Montevideo para comenzar a forjarse una vida nueva.

Mucha de la gente inmigrante se hizo constructora porque algo sabían del tema; y porque había que trabajar, había que comer, había que formar familia y mantenerla…

Hay que recordar que menos de dos años antes había finalizado la Primera Guerra Mundial, librada fundamentalmente en Europa, la que dejó en ese continente una situación social, política y económica desastrosa.

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Pedro Forni Pesenti se afincó en el barrio montevideano de Nuevo París, y allí comenzó trabajando como albañil primero y capataz de obra después.

En Montevideo, Pedro se casó con Mercedes Núñez Vila -sanducera ella- en el año 1928, y del matrimonio nacieron tres hijos: Ángel Liberto, Mirta Mercedes y Elbio Horacio.

Estos jóvenes se criaron en Montevideo, con sus padres; estudiaron y trabajaron en distintas actividades. Por ejemplo, Ángel (Angelito) que era el mayor, trabajó en la fábrica metalúrgica “Ferrosmalt”, hasta que en el año 1955 se produjo una gran huelga y hubo un despido masivo de obreros, entre ellos Ángel.

Él ya estaba casado con Berenice Cames y en las horas que le dejaba libre el trabajo había estudiado “Construcción”; así que frente a la situación de desempleo se vino a Atlántida a trabajar con su padre. También lo hicieron Mirta y Elbio, los otros hermanos de Ángel.

 LA LLEGADA A ATLÀNTIDA

 En el año 1955, Pedro Forni vino a Atlántida como capataz de la empresa constructora “Pérez del Castillo y Soneira”, la cual había sido contratada para construir la mansión de Genaro Carcavallo. Esta vivienda está ubicada en la Calle 5, frente a la “Plaza Montevideo”. Digamos de paso que este señor (Carcavallo) formò parte en 1947, de la primera comisión directiva de la Liga de Fomento de Atlántida (LIFA).

Terminada esa obra, a Don Pedro le gustó para quedarse por aquí y se quedó nomás. Construyó su vivienda en la Calle 24, entre la Calle 3 y Av. Artigas, llamada “Villa Lugano”, en honor a su lugar de origen.

 

 
Al respecto nos cuenta su nieta Gabriela Forni:  
<< La casa de la calle 24, “V. Lugano”, tiene el nombre de la ciudad donde nació el abuelo en Suiza; fue construida por él después de los horarios de obra, lógicamente ayudado por quienes trabajaban en la empresa. Allí, en el fondo, tenía una pequeña huerta donde disfrutaba plantando acelgas, zanahorias, remolachas, frutillas, árboles limoneros, mandarinos y naranjos. Costumbres bien de una persona que vino de tierras europeas y que nos enseñó que con sacrificio y con trabajo se logran las cosas>>.

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Don Pedro se convirtió en constructor por cuenta propia. Uno de los más prolíficos, dejando una cantidad enorme de casas construidas -más de doscientas- según dicen sus descendientes. En su empresa trabajaba a la par de sus obreros, era un obrero más.

Casi enseguida comenzaron a trabajar con él sus hijos varones, Elbio y Ángel, que habían aprendido el oficio y los secretos del negocio de la construcción.

La empresa que inicio Pedro Forni tuvo varias denominaciones: “Pedro Forni - Construcciones”; “Forni Hnos.” y luego “Forni - Construcciones”.

 

 ELBIO  FORNI  NÙÑEZ

LAS  OBRAS  REALIZADAS

 Para mencionar algunas de las obras más características, que se pueden ver en Atlántida, me basaré en la información que brindaron tres nietos de Don Pedro, -Gabriela, Gustavo y Rafael- quienes además han aportado fotografías familiares y de construcciones realizadas por “Los Forni”.

Como ya dije, son más de doscientas las viviendas que se construyeron aquí, con un estilo muy característico de los constructores Forni, con sus techos de tejas a dos aguas, en su mayoría.

 

Además de viviendas, recuerdan los nietos, que Don Pedro dirigió en forma honoraria en 1971, a solicitud de Rotary Atlántida, club del cual era miembro, la construcción de la Fuente de la Plaza de los Fundadores de Atlántida. La Fuente fue proyectada por el Arq. Casal Rocco y el enjardinado de la Plaza por el Arq. González Gatti. La “Plaza de los Fundadores” se inauguró el 7 de diciembre del año 1974.

Sobre esta obra, Federico Bonsignore en su libro dice lo siguiente: <<…Un jubilado, Pedro Forni, abandonaba su descanso para dar inicio a las obras y conducir la construcción de la Fuente. Concurría allí todas las mañanas, hiciera frio o calor y le hablaba de planos, vigas y encofrados a cualquiera que se arrimara a preguntarle por la fuente>>. (Federico Bonsignore, pàg.198).

 

 Don Pedro también construyó con su empresa la escalera principal de bajada a la playa frente al ex “Atlántida Hotel”, así como el Parador que existe todavía al costado izquierdo de dicha escalera de la Mansa.

Otra obra icónica fue llevar a cabo el primer trazado -como plaza- del espacio público que estaba frente al hotel “Las Margaritas”, (hoy sede del Municipio de Atlántida). Hablamos nada menos que de la “Plaza Varela”; cuyo proyecto original fue del arquitecto chino Cheung Koon Yim, a solicitud de Don Juan Torres (año 1978). Hoy la plaza está modernizada, pero manteniendo la base estructural original.

Otra obra importante fue la construcción de la primera parte del Liceo N°1, de Atlántida, en su actual ubicación.

También la Expo-platea de la playa Mansa fue realizada por la empresa “Forni Construcciones”; en ella se utilizaron elementos prefabricados en la estructura principal. Esta fue la última obra que vio finalizada Ángel Forni Núñez, antes de morir.

 
 

En lo familiar, además de su propia casa “Villa Lugano”, Don Pedro construyó dos viviendas en la calle 22 y 7, para dos de sus hijos. Una de ellas (donde funciona una clínica odontológica) todavía es propiedad de la familia Forni.

 

De izquierda a derecha: Berenice Cames de Forni (Coca), Alicia Castillos de Forni (Chichita), Mirta Forni Núñez, Gustavo Forni (atrás), Ángel Forni, J. C. Gancedo, Gabriela Forni, Pedro Forni, Eduardo Gancedo Forni, (niño); Elbio Forni Núñez, Mercedes Núñez de Forni, Horacio Forni Castillos.

LA FAMILIA FORNI

 Como ya mencioné, Pedro Forni Pesenti, se casó con Mercedes Núñez Vila, y de esa unión nacieron tres hijos: Ángel, Mirta y Elbio Forni Núñez.

A su vez, Ángel Forni Núñez se casó con Berenice Cames Valiente (Coca), y de ese matrimonio nacieron Gustavo y Gabriela Forni Cames.

Mirta Forni Nùñez se casò con Juan Carlos Gancedo y tuvieron dos hijos: Gerardo y Carlos Eduardo Gancedo Forni.

Por su parte, Elbio Forni Núñez se casó con Alicia Lucía Castillo (Chichita); y de ese matrimonio nacieron Horacio y Rafael Forni Castillo. Esta parte de la familia se radicó en la ciudad de Bento Gonçalves, Brasil, en el año 1973.

Ángel Forni, con su familia, siempre vivió en Atlántida, en la Calle 22 esquina Calle 7.

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Don Pedro Forni Pesenti, el abuelo, pudo viajar a su tierra natal en cuatro oportunidades; incluso en una de ellas lo acompañó su esposa, Mercedes. Al parecer, “a ella no le gustaban mucho esos largos viajes en barco”, según cuenta Gabriela Forni.

El abuelo Pedro murió en el año 1984, en Montevideo.

La abuela Mercedes murió en la ciudad de Bento Gonçalves, en el año 1989.

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Al pedirle una descripción de su abuelo, Gabriela Forni escribió lo siguiente: <<Nunca le gustó cocinar al abuelo. Era una persona muy tranquila. Sus hobbies eran la huerta en el fondo de su casa y en Semana Santa ir a cortar las flores de marcela a la playa, para poder secarlas al sol y tomar con abuela sus deliciosos tecitos después de almorzar, jugando a la " escoba de 15 " en la mesa de la cocina.Hermosos recuerdos de abuelos muy queribles >>.


                                                                            Wilson Mesa, octubre 2020.

 Fuentes de Información – 

Se agradece la especial colaboración de Gabriela Forni Cames, en relato y fotografías familiares.                        

También colaboraron Gustavo Forni Cames y Rafael Forni Castillo.                                                                                            

Libro –“Atlàntida, historia, imágenes y personalidades a cien años de su creación”, de Federico Bonsignore.

 Imágenes – Fotografías aportadas por Gabriela, Gustavo y Rafael Forni. // Otras fotografías son de Arinda González Bo. 

Artìculo publicado en la Revista CENTRO, Nº 134 - Noviembre 2020.                   

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